La XVI Cabalgata a la Difunta Correa, que se realizará del 15 al 17 de abril en San Juan, encierra en sus “actas fundacionales” una serie de condimentos sociales, económicos y religiosos. La elección del tributo a la difunta Correa se enraiza en la devoción que el gaucho tiene por esta persona. El mito “nace en la década del 40 ó 50, ocasión en la que un par de arrieros encuentran a una mujer muerta, deshidratada en el desierto y con un niño de meses mamando de sus pechos. Los gauchos rescatan a este niño, que en la historia nunca se supo quién era”, contó a Infocampo el presidente de la Confederación Gaucha Argentina, Adolfo Caballero. El momento de la cabalgata tampoco es fortuito y, según contó Caballero, está ligado al momento en que los viñateros culminan sus cosechas y le rinden homenaje “por las mieses cuantiosas”.
Dieciseis años después de que apenas 62 gauchos decidieran arremeter contra el desierto para homenajear a la difunta, el evento será declarado de interés nacional y contará con la presencia de numerosos gobernadores e incluso del ministro Julio De Vido, con ropa de gaucho y a caballo. Como debe ser.
Marianela Garbini
