“Es importante usar embolsadoras que no tengan ningún elementos que puedan cortarla mientras se está armando, utilizar sinfín horizontal en la parte superior y no sobrepasar el tiempo adecuado de almacenaje (un año)”, explicó Juan Carlos Rodríguez del INTA Balcarce. En cuanto a los aspectos sanitarios, Rodríguez asegura que “como es un sistema cerrado, la producción de anhídrido carbónico del grano almacenado permite hacer un control de los insectos que pueda haber en la bolsa”.
“Nosotros vamos a usar mucho silobolsa”, contó el CEO de Los Grobo, Gustavo Grobocopatel. “Lo bueno es que se puede usar el lote y segregar; la contra es que es caro y aumenta el riesgo de perder calidad”, dijo, y aseguró que hacían controles permanentemente. Domingo Yanucci, de Consulgran, opinó que “los que comercializan deben saber que se está trabajando con alimentos los políticos, deben pensar en cómo hacer más grande y eficiente el agronegocio y los que manejan el grano deben saber que el muestreo y el monitoreo son la clave”.
Juan Ignacio Martínez Dodda Especial para Infocampo