“Pero también creemos que el desafío hoy es tratar de lograr que para el productor agropecuario, ese maíz que tiene siga siendo un buen negocio, tanto a través del precio internacional como a través del precio interno. El maíz es una materia prima que tiene mucho potencial para generar negocios de distinto tamaño y de distinta facturación, que crean mucho valor y empleo.”