La nueva definición de los cortes de la cuota Hilton, de 28 mil toneladas anuales destinadas al viejo continente, establece cambios “muy importantes” para la creciente y ambiciosa ganadería nacional, según lo acordado en la VI Reunión de la Comisión Mixta Argentina- Europea.
En diálogo con Infocampo TV, el presidente de la ONCCA, Marcelo Rossi, especificó que en el nuevo biotipo “no se hablará más de dos dientes para calcular la edad del animal y se aceptará un peso máximo mayor a los actuales 460 kilos”.
Además, se estableció la imposibilidad de enviar a la Unión Europea cortes de vacas o toros y se establecieron normas más rigurosas en cuanto a la trazabilidad, como la obligación del llenado de planillas y la existencia de un libro de registro específico para la cuota. También se obligará a la cadena cárnica a faenar primero los animales destinados a Europa, “para evitar que se mezcle el producto con los cortes destinados al mercado interno o a la exportación hacia otros países”, aclaró Rossi.
Por otra parte, el funcionario reconoció que los europeos aceptarán la presencia de residuos de cereales en el sistema digestivo de los animales, siempre y cuando el sistema de cría sea pastoril y no se hayan utilizado ni hormonas, ni anabólicos.
Bajo ningún punto de vista, Europa aceptará animales de feedlots , pero se “permitirá una suplementación con granos en la última etapa de cría, de 60 a 90 días”, enfatizó Rossi.
Después de aclarar que la garantía de calidad y terneza requerida es aceptada con la faena exclusiva de razas británicas y algunas cruzas específicas y mejoradas, el titular de la ONCCA se refirió a las auditorías del organismo.
Desde marzo a la actualidad, el organismo realizó un total de 56 inspecciones, que arrojaron como resultado la “degradación”, o no autorización para Hilton, de una importante cantidad de toneladas y la identificación de las plantas con irregularidades.
Las exportaciones por cuota Hilton significan un negocio de más de 200 millones de dólares y, evidentemente, la Argentina no está dispuesta a perder ni esa porción de mercado, ni la ampliación de otros destinos para los envíos al exterior, que en 2004 llegarían a las 600 mil toneladas.