La falta de humedad adecuada, menor producción, la calidad del producto final, la presencia de problemas fitosanitarios, la depreciación del precio y el robo, fueron los principales problemas que enfrentaron los productores de palta de Tucumán, durante la campaña 2004.
“Fue un año muy difícil porque la sequía que tuvimos durante varios meses provocó la disminución de la producción y una menor calidad de la palta cosechada. Sólo el 50% de la fruta estaba en condiciones de ser exportada; el resto pasó al mercado interno o a descarte”, sintetizó para Infocampo el ingeniero Julio Figueroa, titular del empaque “Las Marías del Matal” y presidente de la Asociación Argentina de Productores de Palta (AAPROPAL).
“La actividad va a crecer”, afirmó. “Hay inversores interesados en producir palta; serían pequeños productores citrícolas que saldrían del limón y se pasarían a la palta, con lo que aumentará la frontera agrícola de Tucumán en este tipo de producción. Aprovecharán la cadena de comercialización que tienen, que es muy similar a la que se necesita para producir y vender palta”, observó. En Tucumán se produce, principalmente, palta variedad Hass. “Exportamos y colocamos en el mercado interno esta clase de producto, que tiene mucha aceptación”, dijo. “Pero esta fuerte presencia en el consumo interno hace que caiga el precio”, reconoció.”Por eso, estamos buscando abrir nuevos mercados, como el chileno y el de otros países vecinos”.
En el caso de Europa -Francia es un gran consumidor-, “estamos ajustando algunos detalles, porque tenemos que llegar con la mejor calidad, para aprovechar la diferencia de precios que tenemos”, concluyó.
En Tucumán hay 85 explotaciones distribuidas en 1.000 hectáreas; es la primera productora de palta (67% del total nacional). El resto está en Salta y Jujuy. La proyección de producción hacia 2009 es de 12.000 toneladas (U$S 12 millones anuales).
DANIEL VACA | Corresponsal en Tucumán