No hay otro cultivo que aporte dinero a fin de año”, afirma Federico Varela, asesor del Chaco. Se refiere al girasol y las preferencias de los productores del norte del país. El análisis es “financiero”, dicen en la Asociación Argentina de Girasol (Asagir).
El bajo costo de implantación en relación con otros cultivos, su alta seguridad de cosecha, bonificación en materia grasa que valoriza aún más la tonelada transportada bajando el costo del flete, son las ventajas del girasol.
Las lluvias de octubre significaron un respiro para buena parte del área girasolera nacional. También, siempre pensando en favor del girasol, hizo su aporte el informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos proyectando cosechas récord y ocasionando una fuerte disminución de las expectativas de precio, principalmente para el cultivo de soja. Sin dudas este cambio de escenario alienta al girasol como alternativa productiva.
Para la región, los pronósticos vaticinan una campaña algo seca hasta fin de año. “Como se registraron buenas lluvias en el 50/70% del área girasolera, se estima que si no se declara una importante seca, los rindes van a ser de aceptables a buenos.
Si la producción de soja del hemisferio sur es normal y el consumo de China no se dispara, hay algunos indicios de analistas que plantean un escenario posible de una soja a u$s130 (con retenciones incluidas) a mayo de 2005. En tanto, el girasol cuenta con un precio estable.