El proyecto de ley de modificación del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), presentado por el diputado Humberto Jesús Roggero, con el objetivo de acotar sus funciones, fue absolutamente rechazado por la entidad ruralista Coninagro, según lo expresó su presidente, Mario Raiteri, en un comunicado de prensa.
Para Raiteri, las modificaciones que propone el legislador contienen una visión distorsionada de los objetivos que motivan y justifican el Instituto de Promoción de Carnes Vacunas. “Constituye un error básico pretender una promoción de la carne exclusiva para el mercado externo. El tema requiere ser tratado en conjunto. Dejar de promocionar para el mercado interno, además de plantear una evidente injusticia para quienes producen y procesan para ese mercado, menoscaba la auténtica función del Instituto”, dice el comunicado.
Según Coninagro, el Instituto debe generar una acción única. “No se puede trabajar con dos estándares sanitarios o de calidad. La población argentina tiene los mismos derechos de consumir carnes garantizadas y con los mismos controles que debe cumplir cualquier corte que se exporta”, dijo Raiteri.
Asimismo, el dirigente recuerda que según el Plan de Acción aprobado, el Instituto debe promocionar las exportaciones buscando alternativas en el consumo interno mediante acciones que inviten a la utilización de cortes de menor valor o cortes no exportables, tan sabrosos y con los mismos contenidos proteicos que los de demanda externa.
Finalmente, Coninagro reafirma que “el proyecto de Roggero no sólo desvirtúa el fin primario del Instituto sino que distorsiona su existencia marginando los intereses de sus aportantes y pretendiendo un ente distinto al que se impone en los principales países productores del mundo”.