Sin largas paradas en planta y tras superar las consecuencias de las fuertes heladas registradas en el invierno, el ingenio azucarero San Javier logró procesar este año 65 mil toneladas de caña de azúcar, entre junio y diciembre. Por lo que las autoridades del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI) y los productores consideraron que fue un muy buen año para la fábrica.
“Basado en tiempos anteriores del ingenio, la molienda de este último año nos dio una grata sorpresa. El ingenio funcionó como no lo hizo en muchos años”, afirmó Cilo Pereyra, productor cañero de San Javier. Si bien tuvieron numerosos problemas a causa de las intensas heladas que castigaron las plantaciones, pudieron entregar toda la caña que les quedó en campo. Debido a esa inclemencia climática los rendimientos de los cañaverales bajaron y se perdió cerca de 15 mil toneladas de caña, mientras que en campo quedaron otras 15 mil toneladas sin cosechar. “Pero gracias al aporte del gobierno y el IFAI se pudo sostener la actividad”, afirmó el cañero.
Por su parte, el productor Lidio Ferreyra agradeció la inversión realizada por el gobierno provincial en el ingenio porque se beneficiaron muchas familias. Recordó que “durante muchos años no funcionó. Es un orgullo tener esto para que todos los productores se beneficien”.
También para el administrador del ingenio, Juan Pereyra, “fue un año muy productivo, molimos cerca de 65 millones de kilos”. Destacó que “el ingenio tuvo una continuidad muy buena”. Además, recordó que decidieron apostar a los empleados del ingenio, quienes se encargaron del aprestamiento y lo harán nuevamente en los siguientes meses. Aclaró que se contrataron muy pocas empresas de la zona para las tareas de mantenimiento.
En tanto, el jefe de la planta, Daniel Javelier, comentó que empezó el desarme de la fábrica para el aprestamiento, para verificar el estado de las maquinas y determinar las reparaciones a realizar. Insistió en que “gracias a las inversiones hechas en los años anteriores tuvimos una zafra muy tranquila, sin grandes roturas”. Por ejemplo, mencionó que esta vez el generador de energía funcionó muy bien y las calderas trabajaron en perfecto estado.
Este año se elaboró alcohol y azúcar blanca, mientras que la intención en 2017 es volver a producir azúcar orgánica y aumentar el volumen de alcohol. Javelier aseguró que en esta ocasión la destilería duplicó la producción, de los 180 días de zafra trabajó 150 días hasta consumir el stock de miel en reserva. “El rendimiento que hemos obtenido es del 7%. El martes pasado finalizó la etapa de destilado, ahora estamos en el proceso de desarmar las columnas y esperamos tener una mayor producción de alcohol el año próximo”, agregó Javelier.
Experiencia con variedad Norte Argentino
Ahora, que se encuentran en la época de siembra, varios colonos aprovecharon para renovar los cultivos y las variedades, con el objetivo de conseguir mejor calidad de materia prima y mayor rendimiento fabril. Para lograrlo plantaron algunas hectáreas con la variedad Norte Argentino 8502. Según los estudios realizados durante cinco años por el Departamento Agrícola del Ingenio Azucarero San Javier junto al INTA Faimallá (Tucumán) y la estación experimental de San Javier es la que mejor se comportó en los suelos rojo profundo y en el que tiene tosca de Misiones, como también al clima de la zona.
El productor Cilo Pereyra contó que tenía un cuadro con la variedad TUC 7742, de buena dulzura. Pero aclaró que “es tempranera, es decir que para alcanzar el óptimo rendimiento de cosecha tiene que ser cosechada a principios de mayo hasta fines de julio. Si no entra a cristalizar el azúcar”.
Para la próxima zafra plantó algunas hectáreas con la Norte Argentino, “ahora estoy experimentando, es una variedad que aguanta un poco más la dulzura y le da mayor cantidad de jugo a la industria, es lo que se necesita para elaborar azúcar y alcohol. Esta se puede cosechar hasta septiembre”. Otra ventaja de esta variedad es que si permanece dos años en campo, “no queda hueca, en cambio la otra si y pierde dulzura”, explicó el agricultor.
El cañero Lidio Ferreyra también tiene la variedad TUC 7742, que registró un bajo rendimiento el último año, por ello está buscando cambiar la variedad. “El departamento Agrícola del ingenio nos aconseja probar con la Norte Argentino. Estamos haciendo semilleros para ver el resultado”, agregó. Ferreyra cultiva caña desde hace 28 años junto a su hermano, entre los dos entregan 600 mil kilos de caña de azúcar por año.
Pago de la deuda con productores
Esta semana se abonarán cinco millones de pesos como parte de la deuda, de diez millones de pesos, a los productores cañeros por la materia prima entregada. El resto se cancelará en la primera quincena de enero. Hasta el momento se abonó cerca de 60 millones de pesos a los productores de la cuenca.
“Pese a la difícil situación económica del país la provincia hizo un tremendo esfuerzo para realizar los pagos semanales con plazos muy diferentes a otras actividades productivas”, explicó el presidente del IFAI, Ricardo Maciel.
Además, manifestó que están satisfechos por los resultados de la inversión realizada en la remodelación de la fábrica. “Eso hizo que este año no tengamos inconvenientes en la molienda por desperfectos y así lo expresaron los propios productores”, afirmó Maciel.
En tanto, las expectativas para el 2017 son buenas y se espera incrementar la molienda teniendo en cuenta que la fábrica ya no tiene inconvenientes en el funcionamiento. Hasta abril se realizarán las tareas de aprestamiento, con los empleados de la planta.