El gobernador de la provincia de Santa Fe, Miguel Lifschitz, visitó este martes en Sauce Viejo (departamento La Capital) una de las dos plantas que posee el Establecimiento San Ignacio S.A., la firma que se dedica a la producción de distintos tipos dulce de leche y quesos.
El mandatario provincial, acompañado por el secretario de Industria, Agregado de Valor e Innovación, Emiliano Pietropaolo; y la diputada provincial Clara García, fue recibido por el gerente general de la firma, Alejandro Carlos Bertin, quien ofreció un panorama de la empresa y los guió en un recorrida por la planta.
“Es una empresa muy tradicional de la provincia, una marca que tiene historia y es muy reconocida en el mercado interno, en Santa Fe y el resto del país, pero también tiene un perfil exportador muy importante a distintos mercados muy exigentes y cuenta con un alto nivel de tecnología”, destacó el gobernador tras la visita.
Establecimiento San Ignacio “es un orgullo de las empresas santafesinas”, afirmó Lifschitz, quien rescató que “a pesar de las dificultades, de la coyuntura, el aumento de los costos internos, el alto nivel de impuestos y las dificultades de la logística que pone trabas al desarrollo de la industria nacional, aún así se puede avanzar y progresar. Esperamos que el año próximo tengamos mejores condiciones de la macroeconomía para poder darle más rentabilidad a este tipo de emprendimientos”.
Finalmente, el gobernador sostuvo que “más allá de que es deseable que vengan nuevas inversiones e inversiones extranjeras, confiamos mucho más en nuestros propios empresarios, que son los que siempre han estado acá y vienen invirtiendo para incorporar tecnología, incrementar su capacidad de producción y ganar nuevos mercados, y creo que con una gestión más eficaz del Estado en todos sus niveles y un trabajo más cooperativo con todas las empresas, podemos lograr mejores resultados”.
Una firma con más de setenta años
La empresa, que fue fundada en 1939 por Ignacio Rodríguez Soto, actualmente cuenta con dos plantas elaboradoras: la principal, ubicada en Sauce Viejo y en la que se producen distintos tipos de dulce de leche y queso crema, y otra en Hipatia (departamento Las Colonias), en la que se elaboran queso azul y otros tipos de quesos semiblandos.
Bertin afirmó que “estamos muy comprometidos con lo que estamos haciendo. Las circunstancias nunca son fáciles, pero hay que ir para adelante”, y comentó que actualmente la empresa tiene 107 empleados directos, “a lo que hay que agregarle el empleo indirecto que genera, con más de 30 tambos, es decir los tamberos y sus familias, también quienes trabajan en los campos, los transportistas, etc., o sea que el efecto multiplicador es muy importante”.
El gerente de San Ignacio comentó que por día “procesamos unos 120.000 litros de leche, hacemos 1200 toneladas de dulce de leche por mes, entre 60 y 70 toneladas de queso azul y unas 250 toneladas por mes de queso crema”.
“Estamos creciendo, apostando fuerte, con mucho sacrificio invertimos, cuesta mucho acceder al crédito, lleva mucho tiempo, es complejo, el sistema financiero no está mirando a las pymes y por eso nos cuesta más, pero a pesar de eso vamos al frente”, concluyó Bertin.
Dulce de leche y queso
Anualmente se procesan en estas dos plantas 40 millones de litros de leche, lo que permite producir más de 12.800 toneladas de productos que se comercializan tanto en el mercado masivo como en el industrial. San Ignacio es también productor de las marcas propias de dulce de leche y quesos frescos de los principales retailers del país.
Dentro de los dulces de leche del mercado masivo, producen el familiar, el reducido en grasas, para tortas y postres (repostero), saborizados, suaves y para diabéticos. También produce dulce de leche para alfajorería y heladerías.
Mientras, dentro de las distintas variedades de quesos, la firma elabora el queso azul, cremoso, barra, romanito, sardo y saint paulin.
