El Movimiento Campesino de Córdoba y organizaciones sociales se manifestaron hoy frente a la Legislatura contra los cambios a la Ley de Bosques Nativos que quiere incorporar el gobierno provincial.
Los organizadores de la protesta convocaron a la ciudadanía “a manifestarse en contra de lo que será una amenaza para todos los cordobeses” al considerar que “si este proyecto se convierte en ley aumentarán los riesgos de inundaciones, sequías, eventos climáticos severos” e “incidirá en el precio de los alimentos, la peligrosidad en las rutas y el deterioro en la calidad del agua y el aire en zonas rurales y urbanas”.
La Legislatura presentó un proyecto para derogar la actual norma de ordenamiento territorial de bosques nativos y aprobar otra norma, que fue tratada esta tarde en comisiones.
El ingeniero Carlos Ramos, del Movimiento Campesino, dijo en declaraciones a Télam que la movilización adhirió “al llamado de una coordinadora de la región de Sierras Chicas” y otras entidades porque el proyecto en tratamiento “no tiene nada que ver” con lo que trabajaron en la Mesa de Diálogo, de la que se fueron “diez o quince días antes de que fuera disuelta”.
“Resolvimos retirarnos porque veíamos que el final iba a ser eso, todo un trabajo técnico que habíamos realizado con otras organizaciones no fue respetado y que finalmente ingresaba un proyecto totalmente diferente”, explicó.
Ramos consideró que eso fue “una falta de respeto más” a la entidad que representa, porque la trataban “como una ONG de ambientalistas” cuando el Movimiento Campesino es “una organización social de productores. Somos parte del campo y tenemos seis asociaciones que son del norte, noroeste, de Traslasierra, todas son asociaciones de productores”, afirmó. “El campo para ellos es la Mesa de Enlace”, agregó.
“El proyecto no cumple con cuestiones esenciales como la audiencia pública, que sí establece la norma nacional, así como también determina la ‘no regresividad’: quiere decir que si en el mapa anterior presenté un 1.900.000 hectáreas de zonas rojas y 2 millones de zonas amarillas, no puedo mostrar una disminución o un achique” de la zona de protección “porque evidentemente hubo desmonte sobre los arbustos, es decir el objetivo es avanzar con el rolado selectivo”, explicó el dirigente.
Y añadió que “cada provincia tiene que legislar pero en base a presupuestos mínimos, exactamente igual que lo que dice la ley o más restrictivo, lo que no puede ser nunca es menos restrictivo”.
Para el Movimiento Campesino “no hay causas para achicar las zonas rojas, que tampoco habían sido respetadas hace años en el trabajo de la Comisión de Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos”, siguió Ramos.
“Hay un trabajo hecho por el Foro Ambiental que se denominó ‘Por qué no se deben achicar las zonas rojas’ al cual adherimos totalmente. Esto no está contemplado en la ley y se beneficia a la Mesa de Enlace”, expresó, y señaló que el proyecto “va en contra de las normativas nacionales”.
El Movimiento Campesino sostiene que “la agenda de las entidades rurales es el acaparamiento de tierras, la lógica financiera de la agricultura y la mentira de la ganadería sustentable con desmonte sólo hará que aumente el precio de la tierra para negociar la compra de grandes capitales extranjeros y locales”.