En el marco de las Primeras Jornadas del Transporte de Cargas, que se realizan hasta hoy en Mendoza, empresarios del sector reclamaron por la fuerte presión fiscal y aseguraron que “por cada $1.000 transportados, $400 son impuestos”.
Durante el encuentro, que reunió a más de 160 empresarios y a 48 cámaras de transportistas de todo el país, se analizaron las problemáticas de la actividad en materia tributaria, laboral e institucional. Asimismo, se propuso la elaboración de un documento con propuestas de soluciones para enviar al Gobierno Nacional y a los provinciales. La idea fue de Guido Calzetti, presidente de la Asociación de Propietarios de Camiones de Mendoza (Aprocam), quien aseguró que el sector cuenta con “una carga impositiva muy pesada”, y adelantó que “este es un punto fundamental que vamos a conversar para hacer propuestas de cómo bajar este porcentaje”.
“Los transportes sufren el cobro de ingresos brutos, con cada provincia cobrando un porcentaje diferente de este impuesto, y los camiones que llevan cargas de una jurisdicción a otra y no están radicados en las provincias de destino, tienen que pagar porcentajes mayores”, explicó Calzetti en declaraciones a la agencia Télam.
En ese sentido, consideró que se debe “hacer un estudio fino del tema impositivo, por eso hemos convocado a las cámaras, vamos a pedir que en cada provincia lo traten economistas para que podamos llevarle al Gobierno propuestas claras de cómo modificar estos valores”.
“Los neumáticos de primera línea, insumos clave del camión, valen en Argentina alrededor de 11.000 pesos, mientras que en Chile, por tener una economía abierta y aranceles más bajos, cuestan 7.500 pesos”, dijo el dirigente, al tiempo que remarcó que presentó una propuesta para pedir un cupo de importación directa de neumáticos. “Si pudiéramos hacer importación directa de neumáticos y lograr este precio podemos bajar 5 a 7% el valor del flete”, dijo.
Por su parte, dirigentes de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeaac) indicaron que “en relación a los costos logísticos, las empresas de transporte no fijan la tarifa”.
“¡No son formadores de precios!”, reclamó el presidente, Daniel Indart. “Nuestros productos no son competitivos y la competencia externa son la conjunción para la caída del transporte. En junio habíamos cerrado con un 6% de aumento, y en julio con el aumento salarial y el aumento de combustible tuvimos un aumento de 14%. Esto es imposible de trasladarlo a precios”, sostuvo.
Para el directivo, “el principal problema es la caída de la actividad, que va en crecimiento. El 75% de nuestros costos es combustible y salarios y esto tiene un fuerte impacto en tarifas. Con el tema combustibles hay poco que hacer, ya que los acuerdos del Gobierno con las petroleras es que deben seguir rigiendo aumentos”.
