Este fin de semana cayeron 180 milímetros en el sur de Santa Fe y se complicaron las tareas de los establecimientos productivos de la zona.
Tal es el caso del tambo El Fortín, que produce 6.000 litros de leche por día en Rufino, donde las lluvias comenzaron el sábado (90 mm), continuaron el domingo (70 mm) y se extendieron hasta el lunes (20 mm), lo que generó mucho barro y dificultad para alimentar a las vacas.
“Necesitábamos agua, pero esto es demasiado”, le contó a Infocampo Jesús Toledo, empleado del lugar. “Ahora estamos luchando con el barro y moviendo comederos para que las vacas coman en un lugar seco. El barro nos vuelve locos con la mastitis y les jode las patas a las vacas”, explicó.
El acumulado de los últimos días preocupa a los productores de leche de la zona, sobre todo porque para el domingo 5 se esperan 30 milímetros más. “Esa cantidad no sería un problema si no hubiera llovido tanto antes”, analizó Toledo, y resaltó que “por suerte” durante la semana salió el sol.
“Llevamos los comederos a la parte alta y no llevamos las vacas a la alfalfa, porque al estar todo blando rompen más de lo que comen, así que las mantenemos a ración, lo que significa más gastos”, describió el empleado del tambo.