La Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (FAIPA) anunció un aumento de hasta el 12% en el kilo del pan que ya rige en algunas provincias y que comenzará a regir en otras en los próximos días. Las causas tienen que ver, principalmente, con el valor de la harina y con la suba de costos de producción.
“La industria del pan de todo el país viene sufriendo una pérdida continua de rentabilidad, de la que venimos alertando desde comienzos del pasado año”, indicó FAIPA en un comunicado, en el que remarcó además que “la situación se ha ido generando por los gravosos incrementos que han venido sufriendo desde hace dos años los servicios y tasas de electricidad, gas, agua y otros que la alcanzan, así como por la presión impositiva y previsional que al momento y pese a los anuncios aún se mantiene, igual que la escalada de precios de nuestros insumos, que no cesa”.
Según la entidad, muchos industriales “ni siquiera van a poder afrontar su pago, transformándose en un costo adicional imposible de absorber, y que repercutirá necesariamente en el precio del pan y de los demás productos que se elaboran en la panadería artesanal, con la consiguiente caída en las ventas”.
A este panorama se sumaría la “clandestinidad y la venta de panificados en lugares no autorizados por el Código Alimentario Argentino”, por lo que consideró que la industria “viene siendo arrinconada por una situación económica que roza con lo insoportable, mediando morosidad, cierres constantes de establecimientos, y la pérdida de puestos de trabajo”.
En el caso de Tucumán, el Centro de Industriales Panaderos provincial confirmó que el aumento será del 12%. En tanto, en Santa Fe se espera una suba del 10%, mientras que en Mendoza sería de entre el 8% y el 10%. En San Juan, por su parte, no habrá modificaciones en el precio al menos hasta febrero, dado que el sector local dijo que no registró incrementos en las materias primas.
Paralelamente, en Salta y Santiago del Estero, ya se vieron los cambios en los últimos días, con valores que van de los $35 a los $40 para el pan francés, y facturas que ya valen entre $6 y $8.