La Sociedad Argentina de Apicultores (SADA) realizó este miércoles un “abejazo” en el Senado de la Nación y frente al Congreso, con el fin de reclamar políticas para reducir la mortandad de colmenas, luego del caso de las 72 millones que murieron en Córdoba.
En primer lugar, los representantes de SADA fueron recibidos por la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Senado, cuyo presidente, Fernando “Pino” Solanas, les expresó su apoyo al asegurar que “sin abejas no hay vida”.
Solanas destacó la “importancia de la abeja en la biodiversidad” y afirmó que se debe tratar el tema en forma parlamentaria.
“Las abejas se pierden ahí donde el modelo agroindustrial se desarrolla”, siguió, por su parte, Lucas Martínez, presidente de SADA. En ese sentido, Juan Kussrow, vicepresidente de la sociedad, alertó además que lo que ocurrió en Traslasierra “no es un hecho aislado, sino que tiene réplicas en distintas ciudades del país”. “Ya pasó en San Pedro y en Pergamino y seguirá pasando si no se regula en este sentido”, lanzó, y advirtió que “el Senasa no controla lo que hay que controlar”.
En tanto, la senadora Silvina García Larraburu, autora del proyecto de Ley de Promoción de Biodiversidad en Ambientes Cultivados, consideró que “es fundamental que tomemos conciencia de cómo nos estamos intoxicando” y sostuvo que “la biodiversidad está siendo destruida a una tasa alarmante, es prioritario mejorar y mantener los procesos ecológicos en los ambientes cultivados y fomentar las actividades de enriquecimiento, conservación, mejoramiento y manejo sustentable de dichos espacios”.
En concreto, para SADA se debe “encausar este proyecto de ley para el desarrollo de la apicultura”, y aseguraron que “sería un buen puntapié para empezar a trabajar por una Ley Apícola“. Según la entidad, el sector atraviesa una “frágil situación” debido “al modelo agroindustrial basado en el monocultivo transgénico y el uso de grandes cantidades de agrotóxicos”.
En la reunión también estuvieron presentes los miembros del Consejo Federal de SADA formado por 20 asociaciones y cooperativas apícolas del país, quienes expusieron la situación de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe y Chaco.
Al cierre, tanto Solanas como García Larraburu acordaron avanzar en el tratamiento del proyecto sobre Biodiversidad.
Mientras tanto, en la Plaza del Congreso un grupo de apicultores que no pudieron ingresar al recinto se congregaron con equipo de trabajo y ahumadores para expresar su apoyo a la causa.
