Aunque se lo considera un cultivo estival, el girasol está presente en las cuatro estaciones en Argentina: su siembra comienza en invierno en el norte del país y se extiende luego a otras regiones del territorio nacional.
Por eso, gran parte de las hectáreas que ocupará este año la oleaginosa estaban en pleno proceso de implantación cuando se realizó el 23° Congreso de Aapresid en Rosario.
“Estamos convencidos de la oportunidad que tiene Advanta de posicionarse como una marca cercana al productor, porque la alimentación y la sustentabilidad son dos ejes que logramos plantear de manera muy concreta“, expuso la gerenta de Marketing de la compañía, Paula Castaño.
“A esto no lo vemos únicamente como una oportunidad de negocio, sino que se trata de una oportunidad para sostener el valor que tendrán los cultivos ante la futura demanda global de alimentos, y así expandir el área agrícola tanto de girasol como de sorgo”, planteó.
En esa línea, la charla “La vuelta del girasol: tendencias en manejo”, a sala llena, tuvo a Julián Siri, gerente de Desarrollo, como uno de los oradores principales.
NOVEDADES EN GIRASOL
Allí se dieron a conocer las aptitudes de los cuatro híbridos que conforman la “Super Era Advanta” en la actualidad con la cual pretende quedarse con 10 puntos del market share para esta campaña, gracias al crecimiento que la compañía viene mostrando en los últimos años.
Por eso la apuesta pasa por los híbridos ADV 5505 CL, ADV 5407 CL, ADV 5310 CL y ADV 5250. En todos los casos se trata de desarrollos genéticos que garantizan grandes rindes, estabilidad, adaptación a los cambios en el ambiente y un diferencial para el productor a la hora de buscar altos niveles de aceite en grano.
Este último punto habilita a quienes apuestan por estos girasoles a poder hacer uso de las bonificaciones estipuladas para el porcentaje oleico, hecho que abre nuevas oportunidades comerciales. El porcentaje de aceite en grano oscila entre el 52% y el 54%, cuando el sistema de bonificaciones a la hora de la fiscalización en los acopios está en el orden del 42%.
“El cultivo de girasol en el norte suele permitir al productor hacer un doble cultivo de gruesa en una misma campaña, diversificando riesgos, intensificando rotaciones y aumentando los ingresos”, indicó Siri, quien agregó que “sigue siendo un elemento financiero clave”.
“Cuanto mayor contenido de aceite se registre en grano incrementará ese ingreso por hectárea. Y en ese aspecto, en el Norte argentino, de los últimos 5 años el girasol fue el cultivo que aportó esa ventaja financiera, rentabilidad y performance al productor”, sintetizó.
NUEVOS MERCADOS PARA EL SORGO
Por otro lado, Advanta sigue posicionándose como una marca con una paleta de cultivos integral. Por eso el sorgo, mercado liderado por la empresa con una posición del 65%, también tuvo su momento especial en el Congreso Aapresid.
“Sorgo 360°: alimenta, rinde y protege el futuro” fue el nombre de la charla moderada por el productor agropecuario Gustavo Almassio. De esta participaron Pedro Pardo, Líder Global de Investigación y Desarrollo en Sorgo para Advanta, Alejandro Tozzini, consultor referente de la consultora “Agri Carbon Trends” y la nutricionista Antonella Robledo Irigoyen.
El propio Almassio explicó el porqué de su presencia ante los referentes. “Yo lo que valoro mucho de Advanta es que siempre trabajó mucho en sorgo, aun cuando este cultivo no era negocio”, remarcó.
“Por eso los productores tenemos que valorar a las empresas que invierten mucho dinero en desarrollo, que es algo que a veces lamentablemente no llega a destino. Pero gracias a ese empuje hoy tenemos sorgos con resistencia a pulgón amarillo y otras enfermedades. Esto hay que darlo a conocer, porque tal vez mucha gente no lo conoce y no lo cultiva, pero el sorgo tiene un potencial enorme”, afirmó.
En ese sentido, Pardo aportó su mirada y lo definió como “un cultivo defensivo”. “El sorgo se adapta mejor a situaciones climáticas complicadas, y su grano o biomasa se produce con menor cantidad de agua que lo que necesita el maíz”, indicó el investigador.
¿Las razones detrás de este fenómeno? Para Pardo esto se debe a “sus raíces profundas y la capacidad que poseen sus hojas de perder menor cantidad de agua que otros cultivos”.
Pardo continuó señalando que “es un cultivo inteligente que se adapta. Es por eso, que a nivel mundial se lo usa no solo para nutrición animal, sino también en la cadena de la celulosa, bioetanol para la energía, y también para la alimentación humana”, afirmó.
Se trata justamente de una de las verticales que más entusiasmo genera en Advanta por estas horas. El sorgo aplicado a la alimentación humana, en palabras de Pardo, “se está convirtiendo en una opción interesante”, impulsado por su ausencia de gluten y la gran cantidad de antioxidantes.
Robledo Irigoyen, licenciada en Nutrición, ahondó en este aspecto. “Tiene muy buenas propiedades como hidratos de carbono, grasas, fibras, grandes aportes para la alimentación, y todo sin gluten”, enumeró.
“En Argentina nuestra alimentación fundamentalmente es a base de trigo, seguida de la avena, la cebada y el centeno. Sin embargo, el sorgo puede ser uno de los alimentos que podemos incorporar en la población que padece de celiaquía, pero también en todos los consumidores”, cerró la especialista.