Una zona de alta producción agropecuaria en modalidad de riego como la del valle del río Colorado en el sur bonaerense cuenta por estas horas con una novedad para los trabajadores que se desempeñan en la recolección de la cebolla: desde el INTA y la Universidad de La Plata desarrollaron maquinarias y mejoras para paliar el clima.
“En términos productivos, el valle bonaerense del Río Colorado es una región con trayectoria en la fabricación de maquinaria agrícola y cuenta con capacidades tecno-productivas instaladas para la fabricación de las estaciones diseñadas”, explicó Juan Pablo D´Amico, especialista en el desarrollo de maquinaria del INTA Ascasubi.
D’Amico agregó que “a mediano plazo, nos proponemos impulsar el desarrollo de proveedores locales y artefactos asociados como bolsas big-bag y baños químicos, porque son tecnologías maduras disponibles en el entramado industrial de esa zona”.
Lo que los desarrolladores buscan es minimizar los riesgos de salud por los largos períodos de exposición al sol, el viento y el frío, dolores musculares y articulares por malas posturas y problemas oculares por el contacto con los ácidos de la cebolla.
Según indicó D’Amico, se trata de una tecnología que busca minimizar los riesgos del trabajo, mejorar las condiciones y reorganizar las actividades de postcosecha que además incorpora ventajas agronómicas al uso del suelo.
La tecnología supone una reducción del impacto ambiental al evitar suelos desnudos en una región ya afectada por fuertes vientos, y permite concentrar el residuo en la cabecera o caminos, habilita el compostaje y reduce la compactación del suelo.
ARGENTINA Y LA PRODUCCIÓN DE CEBOLLA
Nuestro país produce 20 mil hectáreas de cultivos de cebolla anualmente en promedio, que representan el 1 % de toda la superficie implantada en el mundo.
Además de carne, México le dio luz verde a la importación de cebolla argentina
De todas ellas la zona más importante de la cebolla en el país es justamente el valle bonaerense del Río Colorado, con unas 8 mil hectáreas de campo.
Por eso la nueva tecnología fue presentada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en una jornada demostrativa en el campo de la Experimental Hilario Ascasubi, en el sur de la provincia de Buenos Aires.