A través de la Resolución 24, publicada en el Boletín Oficial de la provincia de Buenos Aires, el gobierno bonaerense suspendió por un año la normativa que regula las aplicaciones en los campos de ese territorio, que había entrado en vigencia el pasado 1° de enero.
El motivo está vinculado con la necesidad del Ejecutivo de “poder trabajar en forma precisa, eficiente y detallada, y a su vez optimizar las condiciones de operatividad con los municipios suscriptores del convenio de colaboración y asistencia que permita lograr la mayor eficiencia y puesta en marcha de esta normativa”.
Paralelamente, la resolución establece la creación de un equipo de trabajo técnico multidisciplinario e interinstitucional con el objetivo de elaborar un protocolo específico de aplicación en la zona de amortiguamiento, en el marco de las Buenas Prácticas Agropecuarias, de Aplicación de Fitosanitarios.
Ese espacio deberá formarse dentro de los 60 días en el ámbito de la Dirección Provincial de Fiscalización Agropecuaria, Alimentaria y de los Recursos Naturales, según señaló el gobierno en el texto de la medida.
Es que, en la Resolución 246, se fijaban como zonas de amortiguamiento a ciertos lotes lindantes con sectores urbanos, residenciales y escuelas. Ahí, los productores debían prever ciertas cuestiones tecnológicas y metereológicas en el momento de aplicar los fitosanitarios.
Cabe recordar que la norma fue cuestionada por diversos grupos ambientalistas, ONGs, universitarios y dirigentes.
