“En términos generales es razonablemente habitual que ante un cambio de administración en temas o decisiones que aún no están en vigencia, haya una revisión, existe esa potestad razonable y lo que hace el Gobierno es poner un ‘stay’ por 60 días, durante los cuales estudiará las resoluciones últimas del Gobierno anterior”, explicó Díaz en declaraciones al Ámbito Financiero reproducidas en Télam.
Díaz fundamentó que “dado el precedente de la política comercial y exterior que promueve la nueva administración, se encendió una alarma adicional, pero lo que se hizo no deja de ser un mecanismo habitual: ahora las agencias involucradas y los limoneros californianos tendrán que evaluar el daño de la entrada de limones argentinos”.
“Los limones tenían autorización para ingresar porque cumplieron una serie de requisitos, pero todavía no estaba vigente; se mantiene el status quo precedente: no ingresan los limones argentinos y lo que que se hace ahora es revisar lo actuado por 60 días”, explicó.
Díaz sostuvo además que la presidencia de Donald Trump “no cambia en nada los planes de inversión y el desarrollo de negocios de la AmCham en Argentina; el caso argentino es distinto del mexicano, que constituye un tema candente para Estados Unidos, claro que podremos tener algunos cambios o inconvenientes en temas de financiamiento, colocación de deuda o el impacto de la suba de la tasa de interés”.
“Si el Gobierno argentino implementa un marco regulatorio para exportar servicios, habrá un impulso impresionante en este sector; algo similar a la ley de software o de minería, ya que si se combinan incentivos para cualquier tipo de servicio para exportar el sector puede crecer mucho; hoy servicios es sólo el 6% del PBI y en Brasil el 30%”, concluyó.