La oferta de fideicomisos estaba asociada principalmente a desarrollos inmobiliarios destinados a viviendas u oficinas. Pero eso ya es historia. El modelo de negocio se replica en todos los sectores y es en el campo donde se está imponiendo fuertemente.
El panorama global de la última década hizo que muchos inversores vean el magnífico potencial de los campos paraguayos. Ubicación geográfica, temperaturas, lluvias y amplitud de tierras vírgenes y fértiles además de una política económica estable y pujante hacia el sector, hicieron que el país guaraní se consolide como el destino latinoamericano preferido para negocios agrícola-ganaderos.
Fue por este motivo que se empezaron a crear organizaciones de inversores que se unen para desarrollar emprendimientos en conjunto comenzando desde la compra de la tierra. Con oportunidades a la vista y una demanda creciente de interesados en apostar al Paraguay, surgieron también muchas empresas que los nuclean y les brindan el know how necesario para garantizar el éxito.
Latam Farms por ejemplo, es una empresa regional compuesta en parte por argentinos expertos conocedores del campo y de su explotación. Actualmente ofrecen un fondo de inversión para transformar campos poco productivos del Chaco Paraguayo en pasturas de alta calidad, que sirven a la ganadería –casualmente- en uno de los países exportadores de carne más competitivos del mundo.
El ROI en este caso, viene dado en primera medida por la apreciación del valor de la tierra al momento de la venta y luego por el margen operativo.
Lo llamativo de este movimiento que es tendencia, es que abundan diferentes negocios pero bajo la misma premisa, diversificar el capital e invertir en grupo.