El fuerte ajuste a la baja en los precios de los productos lácteos neozelandeses hizo que el mercado de China, que se había constituido desde mediados del año pasado en un destino importante para los lácteos uruguayos, redujera fuertemente los volúmenes comprados y desapareciera como destino para la leche en polvo.
De acuerdo a datos de Aduanas, los últimos registros de exportación de leche en polvo para China son en abril, tres meses atrás, luego de haber alcanzado un pico de compras de 4.550 toneladas de estos productos en agosto del año pasado.
El espacio conquistado en el principal importador de lácteos del mundo había sido consecuencia de la fuerte reducción del saldo exportable de Nueva Zelanda, su casi absoluto proveedor. Con la baja de los precios en este país —que por el momento fueron solo parcialmente acompañada por los precios de exportación uruguayos— parece lógico que los importadores chinos vuelvan a concentrar sus compras en su principal proveedor. El valor medio de exportación de la leche en polvo entera de Uruguay comenzó a mostrar sobre mediados de junio una brusca corrección a la baja. Como se ve en el gráfico, el valor medio de exportación, que promedió más de US$/t 5.000 desde principios de abril hasta mediados de junio, en las últimas semanas sufrió una corrección del orden de 10%.
Según publicó Lechería Latina, el promedio de las últimas cuatro semanas al 27 de julio fue de US$/t 4.592. Este descenso en el valor medio de exportación fue acompañado por una disminución de los volúmenes exportados y por un redireccionamiento de los destinos, focalizándose nuevamente en los países de la región.
En el primer trimestre del año los países latinoamericanos fueron el destino de 48% de los embarques de leche en polvo entera y pasaron a ser el 80% a partir de abril
